jueves, 5 de septiembre de 2013

Perro fantasma: el camino del samurai (Ghost dog: the way of the samurai /1999)

Perro fantasma: el camino del samurai
Una solitaria paloma mensajera vuela sobre la ciudad.  Así comienza Perro fantasma: el camino del samurai (1999), película escrita y dirigida por el cineasta independiente estadounidense Jim Jarmusch y protagonizada por Forest Whitaker en el papel de un moderno samurai en las calles de una ciudad estadounidense.  Perro fantasma es un asesino a sueldo de la mafia que sigue los preceptos de los samurais del antiguo Japón, y por esto mismo esta unido indisolublemente a Loui  (John Tormey), un integrante de la mafia que le salvó la vida en su adolescencia. Sin embargo uno de los trabajos no sale bien y la situación se sale de control.

     La ajustada interpretación de Forest Whitaker,  oscar al mejor actor 2006 por su interpretación del dictador ugandés Idi Amin en El último rey de Escocia, hace creíble lo inconcebible: un joven negro de un suburbio negro de los Estado Unidos devenido en samurai.  Como llegó a convertirse no lo sabemos, pero sin dudas sigue todas las reglas y preceptos de un guerrero samurai hasta el final.  Por otra parte Jim Jarmusch coloca los personajes secundarios justos e imprescindibles que completan la historia: un heladero haitiano (Isaac de Bankolé) que se comunica con Perro fantasma sin saber una palabra de inglés, una niña (Camille Winbush) que charla de literatura con él, Loui su salvador y señor hasta el final, un grupo de mafiosos con todos sus cliches y prejuicios y poco más.  Y para darle el broche de oro banda sonora producida por RZA (Robert Fitzgerald Diggs) rapero, productor musical y actor estadounidense que se despacha con ritmos de hip hop, blues y soul sin desentonar ni un poquito con la propuesta cinematográfica.
     
     Es un homenaje del director a la película El silencio de un hombre (Le samourai) de 1967, dirigida por Jean Pierre Melville e interpretada por Alain Delón que marcó un hito en el cine negro.